Nota tomada de "Salvemos El Futbol"
Un mundial diferente. Las verdaderas aristas sociales del deporte
Un informe del sociólogo mexicano Fernando Segura Trejo nos aproxima al mundo de un encuentro deportivo mundial diferente: el de los Homeless. En nuestro país, la ONG “Hecho Club Social”, es quien selecciona a los participantes. Se trata de una entidad de estrecha vinculación con Salvemos al Fútbol.
La Homeless World Cup. ¿ Qué es el Mundial de los Sin Techo ?
Fernando Segura M. Trejo
La primera reacción de muchas personas al enterarse de que existe un Mundial para personas sin techo, o sin domicilio fijo es preguntarse con algún sentimiento de incredulidad: ¿de qué se trata? Aquellos que nunca han oído hablar de él se formulan instantáneamente una multitud de preguntas. ¿Qué tipo de Mundial? ¿Quiénes lo organizan? ¿Quiénes son los jugadores? ¿Cómo llegan al Mundial? ¿Cómo se los selecciona y quién lo hace? Surgen incluso dudas. ¿Cómo puede ser que personas sin domicilio fijo jueguen al futbol? ¿Se resuelven sus problemas? ¿Para qué le sirve a una persona sin techo jugar al futbol? ¿En qué ayuda el futbol? Si hay dinero detrás de los proyectos ¿no es mejor invertirlo en otras cosas? ¿Cómo se puede combinar el uso del futbol con otras soluciones?
Existe un mundial en efecto, creado para toda persona que haya estado en situación de desamparo, de acuerdo a la definición amplia de homeneless de Naciones Unidas, en algún momento durante un lapso de año y medio previo a la edición anual. Esto implica jóvenes que han sufrido situaciones de calle, personas en albergues (shelters), refugiados y desplazados políticos así como personas en recuperación de diversas adicciones. Cuatro jugadores contra cuatro: un arquero, dos defensores-volantes y un atacante obligado a permanecer de mitad de cancha para adelante: algunas reglas deportivas específicas de un futbol que se juega en canchas sintéticas con paredes al estilo indoor soccer. Un acontecimiento que se organiza todos los años desde el 2003 a lo largo de una semana, en una ciudad determinada. Han pasado Graz en Austria, Gotemburgo en Suecia, Edimburgo en Escocia, Ciudad del Cabo en Sudáfrica, Copenhague en Dinamarca, Melbourne en Austria y Río de Janeiro en Brasil. La edición de 2011 tendrá lugar durante el 20 y el 29 de agosto en París. En 2012 en México y en 2013 en Poznan, Polonia. Las oficinas en Edimburgo, donde trabajan los organizadores durante todo el año. Alrededor de sesenta asociaciones acompañan no sólo a los jugadores seleccionados sino a una gran cantidad de personas que juegan en las ligas amateurs de cada país. Desde 2008 existe una versión femenina.
Otra de las preguntas que surge tiene que ver con el respeto y la ética de los criterios de participación. ¿Todos los equipos llevan realmente personas que se encuentran en esas situaciones o algunos llevan jugadores para ganarlo? Después de haber seguido tres ediciones consecutivas me es posible afirmar que la mayoría de las delegaciones tienen una actitud de fair-play. Ha habido, es cierto y hay que decirlo, algunos casos de sospechas sobre algunos jugadores, en el sentido que correspondían al espíritu y los criterios solicitados. Las mismas asociaciones deben ser responsables de la ética y de los proyectos sociales por encima de los resultados deportivos.
¿Qué es para mí la Homeless World Cup? Ha sido un objeto de investigación sobre las facetas de acción colectiva que permiten la coordinación entre diversos actores para que el mundial se lleve a cabo todos los años. Me he interesado tanto por los detalles de su organización como por los efectos que produce en los jugadores que participan. Más allá de una posición favorable, busco dar cuenta de lo que he observado y de lo que he aprendido en múltiples entrevistas con jugadores de varios países. En Francia, donde hice la mayor parte de estos tres años y medio de investigación de campo, he procurado entrenarme y jugar al futbol con varios equipos de la liga local. Acompañar el proyecto desde las canchas así como el trabajo de los entrenadores y los responsables de las asociaciones. Formar parte, también, de las reuniones de debate y de reflexión.
Articulado por el mundo de las ONG y todas las asociaciones civiles que ayudan a los jugadores, la organización del mundial requiere todos los años la constitución de un comité local, encargado de preparar el escenario, asegurar el presupuesto y alojar a las delegaciones durante una semana. Lejos de ser una solución para los participantes, la experiencia deportiva constituye una etapa en los procesos de inclusión, o de inserción, diagramados (o deseados) por las asociaciones y los propios jugadores. Nada garantiza que el Mundial pueda transformar las vidas de sus participantes. Solamente el trabajo de acompañamiento y la voluntad de los propios jugadores pueden producir cambios significativos. Sin embargo, las experiencias que se reflejan en los testimonios indican un momento de mucha emotividad, de gran intensidad, de representación de un combinado nacional, de orgullo, de deseos de cambio y de intercambio cultural, entre otros sentidos otorgados. La esperanza de revertir situaciones puede acumularse así como desvanecerse varios meses después, de acuerdo con los niveles de expectativas alcanzados. La idea es la integración social a los circuitos locales creados para personas que ha sufrido, o sufren todavía, diversas formas de exclusión. Empero, no todos los jugadores de las ligas pueden viajar. Preparar una selección se asocia, inevitablemente, con la esencia de toda competencia internacional. Las asociaciones deben asumir parte de la frustración del golpe para aquellos que no son elegidos. El futbol puede integrar e incluir tanto como puede excluir.
Insisto en un punto, la creación de oportunidades y la reafirmación del auto-estima se reconstruye con los meses, incluso con los años de trabajo. El Mundial es sólo para unos pocos. Puede servir, cierto, tanto para los participantes como para hablar de varios problemas sociales inatendidos. Aspiro a reflejar distintas situaciones y realidades de todo esto en una tesis que debo entregar en unos meses, pronto.