21 de enero de 2012

La Dimayor, avaricia como principio


Faltando ocho días para el inicio de la Liga colombiana de fútbol no hay acuerdos entre las empresas de cable Telmex y UNE para que puedan pasar los partidos, hasta el momento solo la multinacional DirecTV puede hacer la transimisión de 8 partidos por fecha mientras el restante seguiría por RCN.

El presidente de la Dimayor anuncio a los medios "su deseo para que los colombianos puedan ver el fútbol", pero fue su misma decisión en compañía de su séquito la que hoy en día tiene en duda la transmisión. Ellos no dan motivos ni razones, supongo no tienen porque hacerlo, Jessurum afirmó que este año el contrato televisivo había cambiado por que sí. Es mucho más rentable sin duda, el aumento de los millones de dolares cobrando por usuario y ya no por cuota fija como hasta el año 2011 funcionaba es bastante bueno para seguir haciendo mucho más dinero a costa del deporte popular.

¿Que hace la Dimayor con tanto dinero?

La situación de los jugadores profesionales en la gran mayoría de equipos de la Liga es critica, se les violan sus derechos laborales (ni hablar de las otras categorías) y el ente que dirige el negocio del fútbol se hace el de la vista gorda y ahí no mete la mano. Los clubes por su parte tienen dirigentes que no son capaces de sacarlos a flote y ser instituciones viables, lo que a la Dimayor no le preocupa mientras existan un cierto grupo de equipos que sigan manteniendo los torneos activos.

Los números de la Dimayor se mantienen en secreto, valiéndose en parte en las reglas de la FIFA la cual prohíbe la intervención de los gobiernos en estos temas. La Selección Colombia no tiene problemas financieros y sí deportivos, por lo que tampoco se explica la necesidad de obtener más y más dinero sin que se vea como benefician esos costos al fútbol. No. Lo único que debe beneficiar son las cuentas personales de los dirigentes del balón pie colombiano, avaros sin escrúpulos.

Basta ya del enriquecimiento ilícito de los "dueños" del fútbol, no olvidemos que la pelota es de todos nosotros. Los medios siguen llenando las paginas contando la noticia, no existe una critica real al problema de fondo, la puja es entre las empresas y la Dimayor. Las cuales no creo que no lleguen a un acuerdo, Telmex y Une tendrán que subir sus ofertas y la Dimayor aumentara las ganancias del lucrativo negocio mientras el deporte sigue de capa bajada con jugadores mal pagados y sin las prestaciones obligatorias por ley y los clubes superviviendo semestre a semestre para poder jugar.

No faltará el que diga que el que quiera fútbol que vaya al estadio y claro, si estamos en Bogotá pues vamos y vemos a Millos, pero ¿y los cientos de miles hinchas que no viven en las ciudades donde juegan sus equipos qué? Como quitarle esa pequeña satisfacción a los colombianos que esperan sentarse el domingo con sus amigos y familiares entorno a un equipo que les da emociones, buenas y malas. A ellos, los dirigentes, solo les importa seguir costeando sus estilos de vida burgueses.